Alemania: Weltmeister!

Estoy contenta por Alemania y cansada de escuchar que en Argentina jugaba “el dios” Messi. Pues bien, si Jesús resucitó al tercer día, la albiceleste tiene cuatro años. La Mannschaft entra en los anales conquistando la copa del mundo en continente americano. Y como la Historia la escriben los vencedores…Este capítulo será en alemán…

Vor vierundzwanzig Jahren…es decir, hace veinticuatro años que Alemania levantaba su última copa del mundo…Así podría empezar, perfectamente, un cuento de los famosos hermanos Grimm…Hemos disfrutado como niños de un sueño que comenzó el doce de junio de dos mil catorce y ha tenido un gran despertar: El mejor premio que todos los germanos, y sus simpatizantes querían… Las sonrisas de unos contrastaban con las lágrimas de los otros. Los argentinos vieron como se les escapaba la final. Su estrella se apagaba por momentos y eso que se llevó el premio de consolación: El balón de oro más cuestionado de la historia…

levantan copa

Con esta imagen, se cierra el último capítulo mundialista. Brasil caerá en la memoria de muchos y en el más profundo de los olvidos de todos aquellos que defraudaron a su afición o a sí mismos. En la vida no hay excusas cuando se trata de luchar por lo que se quiere. Las mejores cosas no son fáciles de conseguir. Dijo La Fontaine que “ningún camino de flores conduce a la gloria”. Alemania no lo tuvo fácil pero luchó por lo que quería. Ni la debilidad por la gripe hundió la mentalidad de estos campeones. Si se quiere se puede…

El reinado futbolístico dura cuatro años, por lo menos. Es el momento de disfrutar lo conseguido. La cuarta estrella lucirá en la constelación alemana sin riesgo de que pueda apagarse. La Mannschaft demostró que es un equipo y que la unión hace la fuerza. Impasible se mostró Löw hasta que llegó el momento de celebrar el triunfo. Esa sangre fría que muchos critican es necesaria en muchas circunstancias de la vida. Los que la han necesitado saben a lo que me refiero…

En las derrotas se conoce a los “auténticos” ganadores. De ellas siempre se desprende una lección. Muchos no aceptan perder y agachan la cabeza por cobardía. Es más, no se atreven a mirar a los ojos al vencedor… Si se lucha y se pierde no hay de que avergonzarse…

Sin ninguna vergüenza lucí mi “Trikot” antes del mundial, durante y por supuesto que lo haré después. El fútbol le debía a Alemania una copa y se la ha dado. Y precisamente, lecciones, y no sólo futbolísticas, han dado estos jugadores en Brasil…Que cada quien piense en ellas…

Enhorabuena a los campeones. Que disfruten el momento…pero es importante que no olviden estas palabras de Oscar Wilde: “El único deber que tenemos con la historia es rescribirla”…

Jimena Bañuelos (@14ximenabs)

 

 

Cuatro candidatos para una copa

 

El menú ya está escogido y las semifinales a punto de empezar. De toda la carta, que ha sido mucha; al final hay que decantarse por unos entrantes a base de una tabla de quesos holandeses. De plato principal, un buen “bife” acompañado por el tradicional Schupfnel alemán. Para beber, lo mejor será una cerveza bien fresquita. De postre, unos alfajores. Y como en toda celebración que se precie, habrá que brindar por la salud de todos los invitados a esta fiesta del fútbol con unas ricas caipirinhas. Dicho así, las semifinales de Brasil 2014 son, como poco, apetitosas.

Apetitosas porque ya solo quedan cuatro candidatos para levantar la ansiada copa del mundo. Brasil, Alemania, Holanda y Argentina están a noventa minutos de llegar a la final de un mundial marcado por las polémicas arbitrales, las lesiones y, como no, el clima. Pero ya no valen las excusas, el esfuerzo ha sido mucho y el reinado futbolístico solo lo alcanzará uno. La historia la escriben los vencedores pero todavía no sabemos si será en portugués, en alemán, en holandés o en español… De Maracaná solo saldrá un campeón.copa

En la fase de grupos los cuatro combinados nacionales quedaron en primer lugar. Es cierto, que no todos mostraron su mejor futbol pero, a veces, aliarse con la diosa Fortuna da resultado. En los octavos y en los cuartos, unos sufrieron más que otros. Que si prórrogas, penaltis, el calor, la gripe…En fin, que había que pasar como fuera. Pero ya lo dijo Séneca: “Vencer sin peligro es ganar sin gloria”. Y precisamente, ganar la gloria es de lo que se trata.

El martes desde el Estadio Mineirao, brasileños y alemanes buscarán el billete para Maracaná. Los cariocas afrontarán este trascendental partido con las bajas de Neymar y Thiago Silva pero siguen siendo los anfitriones, y eso, es un factor añadido. Por su parte, la Mannschaft ha demostrado que ni las temperaturas sofocantes, ni los virus gripales pueden reducir su potencial. No sabemos si los de Löw sabrán bailar samba pero si derrotan a la canarinha… Aprenden seguro…

Y veinticuatro horas más tarde, en el Arena de Sau Paulo, “la naranja mecánica” del estudioso Van Gaal intentará eliminar a la versión más light de Argentina. Una albiceleste que encabeza Leo Messi pero que no podrá contar con Di Maria. Sin duda, una baja muy importante para los de Sabella. Por su parte, los holandeses están en plena forma. Nada ha calmado las ansias de gol de Robben, Van Persie, y Sneijder. Así que deberán afrontar el encuentro como lo que es: Un todo o nada.

Es el momento de apostar por los favoritos, de disfrutar de los partidos y como no sabemos que idioma hablarán los campeones…Digamos simplemente: Alea iacta est!

Jimena Bañuelos (@14ximenabs)

Francia y Alemania, cara a cara

alemania-francia

En francés es: Deux, en alemán: Zwei y en español: Dos. Precisamente, esos han sido los goles que dieron el pase a cuartos a los franceses y a los alemanes. Los combinados europeos se deshicieron de los africanos. Eso sí, unos sufrieron más que los otros para poder seguir soñando con la copa.

Primero fueron los franceses y los nigerianos los que luchaban por un puesto en los cuartos. El técnico nigeriano, Keshi, presentó un once muy ofensivo para amedrentar a los de Deschamps. A juzgar por lo que se vio en los primeros minutos en el Estadio Nacional de Basilea lo estaba consiguiendo. Les blues generaban pocas ocasiones y su estrella Benzema no llegaba a brillar. Estaba claro, que Francia debía cambiar y volver a ese espíritu que traía de la fase de grupos en la que muchos revivieron la Francia del noventa ocho. El cronómetro corría y los goles no llegaban. Con el empate a cero se llegó al descanso en el que había que plantearse una única cuestión: ¿Cómo inaugurar el marcador?

Querían cambiar el marcador y para ello tenían que cambiar la actitud. Y sí que cambió. Quedaban cuarenta y cinco minutos y el objetivo estaba más que claro. Aunque no fue hasta el setenta y ocho cuando Pogba adelantó a los europeos. La eliminatoria se teñía de azul, y más aún, cuando el nigeriano Yobo anotó en propia puerta, en el noventa, el segundo gol para el cuadro francés. Desde este momento, les blues esperaban a su próximo rival.

Un rival que iba a salir del duelo entre Alemania y Argelia. Mucho se esperaba de la Mannschaft y muy poco se vio de ella. La potencia a la que la selección germana tiene acostumbrados a sus seguidores apenas se vio. Durante los primeros cuarenta y cinco minutos, Neuer salvó la portería alemana en más de una ocasiones. Los argelinos llegaban sin problemas y perdonaron mucho…Eso al final se paga… Aún así, los cerca de cuarenta y tres mil espectadores en el Beira-Rio de Porto Alegre estaban presenciando, in situ, como la Argelia de Vahid Halilhodzic dominaba el encuentro.

Un dominio que continuó durante la segunda mitad del encuentro, aunque el combinado alemán comenzó a generar más peligro pero sin goles. Todo hacía presagiar que se llegaría a la prórroga. Y así fue. El cansancio de los futbolistas era evidente. Ahora sí se iba a poner a prueba la preparación física de los jugadores: Había que aguantar un total de ciento veinte minutos.

Si los goles se hicieron de rogar en los noventa reglamentarios, nada más comenzar la prórroga los de Löw hicieron el primero. Schrrule adelantó a los suyos y Özil sentenció la eliminatoria. Un buen susto se llevaron los germanos con el gol de Djabou. Pero fue solo eso, un susto.

Francia y Alemania se verán las caras el cuatro de julio para buscar el pase a la semifinal. Si de favoritos hablamos que cada quien decida. Lo único que hay seguro es que solo vale: Gagner le jeu o Das Spiel zu gewinnen. Es decir: Ganar el partido.

Jimena Bañuelos (@14ximenabs)

Alemania al cien por cien

16_11am_Alemania-Portugal

 

Neuer, Boateng, Mertesacker, Hummels, Howedes, Kroos, Lahm, Khedira, Özil, Lahm, Müller y Götze fueron los elegidos de Joaquin Löw para debutar en el Mundial de Brasil. Con actitud, potencia y a por todas saltaron al terreno de juego los alemanes. La Mannschaft quería la victoria y la consiguió de qué manera.

Tras escuchar los himnos comenzó un encuentro en el que la calidad estaba más que asegurada. El ambiente del Arena Fonte Nova era espectacular. Sendas aficiones estaban preparadas para gritar y cantar a los suyos. En el campo, ni los alemanes; de blanco, ni los portugueses, de rojo querían defraudar a los suyos.

Dos minutos tardaron los germanos en acercarse a la portería de Patricio. Fue el primer aviso alemán del encuentro y, por supuesto, no el último. En el cronómetro los minutos transcurrían, Cristiano Ronaldo tuvo su ocasión pero no obtuvo premio. Khedira falló a portería vacía…Pero el marcador continuaba a cero. Los errores en estos partidos pueden ser muy caros…Pero poco quedaba para ver como Alemania inauguraba el marcador. Con sangre fría, en el diez, Müller marcó la pena máxima. Un claro penalti de Pereira que puso por delante a los de Löw.

Aún quedaban más de treinta minutos para llegar al descanso y ningún equipo se relajaba pero la selección alemana se fue creciendo poco a poco… Y en el treinta y dos, Hummels, de cabeza, hizo el segundo del encuentro. La euforia se apoderó de los seguidores de la Mannschaft. El marcador lucía un dos a cero que los portugueses se resistían a asumir…

Los de Löw querían más goles y los de Bento debían reaccionar…Y tanto que reaccionaron pero no como debían. En el treinta y siete, Pepe fue expulsado…Esa es la forma de ayudar a los tuyos… Con uno menos, Portugal estaba tocada pero no hundida hasta que en el primer minuto del descuento en el que Müller, de nuevo, batía a Patricio.

Llegó el esperado descanso. El marcador mostraba un tres a cero muy alemán. Portugal debía recomponerse pero estaba claro que Alemania no iba a relajarse en la segunda mitad.

Quedaban cuarenta y cinco minutos de partido. Se esperaban más goles y los hubo. Perdonaron los germanos muchas ocasiones hasta que en el setenta y ocho, Müller anotó el cuarto. Portugal ya no tenía opción. El juego de los de Löw fue todo un espectáculo, sin duda, son firmes candidatos a levantar la copa. Su próximo rival será Ghana. Habrá que esperar hasta el sábado para disfrutar del potencial alemán. De momento, ya ha humillado al cien por cien, a la Portugal de Cristiano Ronaldo.

Jimena Bañuelos (@14ximenabs)