A la conquista de la Copa (II)

De pequeña me enseñaron que dos más dos son cuatro… Y esos han sido los goles que el Atleti ha marcado al todopoderoso Real Madrid en tan solo una semana. Si seguimos con los números, cierto es, que cuatro fueron los jugadores madridistas premiados en Suiza pero los rojiblancos sin reconocimientos e ignorados por muchos, cuentan sin duda, con su afición. Un premio que no hay oro que lo pague.

Unos aspiraban a la remontada porque en el Bernabéu todo es posible para unos y para otros. Porque,REAL MADRID - ATLÉTICO DE MADRID precisamente, fue un viejo conocido, un niño, el que tenía ganas de jugar y el que congeló, en una fría noche, las aspiraciones merengues. De poco sirvieron los goles de Ramos y Ronaldo porque el conjunto rojiblanco no estaba dispuesto a tirar la toalla. Los de Simeone saben pelear, saben sufrir, y además, saben aguantar las patadas que los vikingos, a la desesperada, saben hacer como tantos otros jugadores… O es que no recuerdan “en el equipo de Dios”, como lo definió Ramos, que “el que esté libre de pecado que tire la primera piedra”…

Está claro que las cosas han cambiado. Pasaron muchos años hasta que el Atleti consiguió salir de Concha Espina ganando y ahora no paran. Perder no le gusta a nadie. Ya decía Kennedy: “La victoria tiene un centenar de padres, pero la derrota es huérfana”. El flamante Balón de Oro dice ahora que “la vida no es solo goles”. Pero en el fútbol te ayudan a ganar los partidos y las eliminatorias. Es más, asegura que “no es de otro planeta”, menos mal que no es galáctico…

A pesar del menosprecio de muchos, la competición copera continúa. El Atleti se medirá en los cuartos de final al Barcelona. Los de Luis Enrique derrotaron en el Camp Nou a los rojiblancos en su reciente enfrentamiento de Liga. Para los colchoneros la mejor revancha sería eliminarlos sin lugar a dudas. Quedan noventa minutos para sellar el pase a semifinales. Minutos que se presentan emocionantes y habrá que sufrirlos pero ya se sabe que en el fútbol como en la vida; sin lucha no hay victoria… Pero de momento, y con la mentalidad de “el Cholo” habrá que pensar en “el partido a partido”, es decir, en el Granada que el domingo visita el Vicente Calderón.

Jimena Bañuelos (@14ximenabs)

 

A la conquista de la Copa

Como niños disfrutaron ayer los colchoneros en el Vicente Calderón, y no es para menos. El Atlético de Madrid no ha podido comenzar mejor el año. Primero, regresó a la que siempre fue su casa un Fernando Torres hambriento de títulos y como broche final a las fiestas navideñas una victoria al eterno rival. Los goles de Raúl García y de Giménez hicieron que los merengues regresaran a Concha Espina con un marcador sin estrenar, mejor dicho, en blanco.

La noche era fría pero el ambiente estaba muy caldeado. La afición estaba más que preparada para cantar, gritar, animar y aplaudir a los suyos. Hace años siempre se imponían los vikingos no importaba donde se jugara pero algo cambió cuando llegó el gran jefe indio: Simeone. Impuso su filosofía, convenció a todos de algo muy importante no sólo para el fútbol sino para la vida: “Hay que crecer”. Creyendo en uno mismo, todo es posible.atletico_de_madrid_fondos-2688927

Y con más posibilidades están los atléticos de pasar a cuartos. Como bien dijo Ancelotti: “A la eliminatoria le falta noventa minutos” pero aunque sea en el Santiago Bernabéu que no se olviden los vikingos de que el Atleti también juega. La balanza está de su parte. Saldrán a por todas. Igual para entonces, señor Ancelotti, Cristiano ya ha descansando… Al menos, así se justificó anoche el italiano: “Cristiano estaba cansado y por eso no fue titular”. Lo que me hace recordar al escritor estadounidense Eric Hoffer cuando aseguró: “El mayor cansancio proviene del trabajo no realizado”. Ahí lo dejo… De lo que no hay dudas es de que el Atleti peleará. Ya lo dice el himno que tantas veces ha coreado la afición: “Porque luchan como hermanos, 
defendiendo su colores, 
en un juego noble y sano, 
derrochando coraje y corazón”. Y es que en el fútbol y en la vida: Sin lucha no hay victoria. Esa es la actitud de los valientes.

Hoy hay una afición que presume no sólo de sus colores sino de un equipo. Simeone cuenta con todos y la llegada de Torres ha sido, sin duda, un refuerzo físico y sobre todo, psicológico. Ya dijo Donoso Cortés: «Hay que unirse, no para estar juntos, sino para hacer algo juntos.»

Con la victoria de anoche en la Copa del Rey ya en la memoria, los de Simeone trabajan pensando en su próximo rival. Fieles a su mentalidad del “partido a partido”, los rojiblancos se vuelven a centrar en la liga. Son terceros y conquistar los tres puntos es su claro objetivo. El Barça no pasa por sus mejores momentos. Y aunque no será fácil los de Simeone lo darán todo en el terreno de juego. Los colchoneros confían en los suyos saben que pueden y poder es querer.

Jimena Bañuelos (@14ximenabs)