Julio Montalvo: Amistad y música

“Sin música la vida sería un error”. Tenía toda la razón Nietzsche cuando pronunció estas palabras. No importa tu estado de ánimo porque la variedad de estilos musicales siempre se adaptan a ti. Las melodías, las canciones y sus letras marcan cada etapa de la vida, o mejor dicho cada momento del día. No tengo un estilo que me guste más que otro, lo que colecciono, gracias a la música, son recuerdos inolvidables.

Hablando de recuerdos, pienso en como empezó mi amistad con Julio Montalvo. La sonrisa que este cubano luce siempre en su rostro te invita a llenarte de vitalidad, y no es para menos, porque si a ésta le sumamos lo que consigue transmitir con su trombón, sin duda, los sentimientos se ponen a flor de piel. El jazz es el protagonista de la vida de este viejo rockero que admira a Police, Sting o The Beatles, entre otros. Su fiel compañero es el trombón pero en su corazón está su primer instrumento: el violín. De padre violinista aprendió a enamorarse de la música y nunca se cansará de escuchar piezas como el Concierto en Re Mayor de Piortr Tchaikovsky. Han pasado muchos años desde que comenzó, por eso, de su trayectoria profesional mucho se puede hablar. Ha tocado con Perico Sambeat, David Pastor, Mike Mossman, Glaston Galliza y hasta David Bisbal confió en su profesionalidad. Me permito hacer alusión a la carrera de Montalvo porque su humildad es otra característica que lo define.

Con mi amigo Julio Montalvo. Puro jazz.

Con mi amigo Julio Montalvo. Puro jazz.

Y si de definiciones hablamos, él mismo se considera un “músico, poeta y loco”, eso sí con un gran corazón. No lo digo yo, lo dice todo aquel que lo conoce. “El hijo de Elsa” como Montalvo se auto presenta es un maestro de las notas musicales. Sabe transmitir, sabe emocionar y sabe hacer disfrutar, porque él es el primero que es un apasionado de su profesión. Por eso, para no echar de menos a este amigo me quedo con los cd’s y el DVD que con tanto cariño recibo. Julio, que tan bien me conoce, sabe que en más de una ocasión la música es la mejor medicina para determinados momentos. Así que aunque la distancia o el tiempo no me permitan estar cerca de este trombonista, su música nunca deja de acompañarme. Además, a los buenos amigos siempre se los echa de menos.

Julio Montalvo, cubano de nacimiento, comparte el cariño a su tierra con sus sentimientos españoles. Es un maestro del jazz, es el “jefe” de su trombón pero es un servidor de su público. Y como público, y parafraseando a Ingrid Bergman en Casablanca, te digo: “Tócala otra vez, Julio”.

Jimena Bañuelos (@14ximenabs)

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Fernando Marco y Jordi Fabregat a ritmo de Jazz

Arranca el mes de agosto cargado de nombres, nombres que son sinónimos de buena música, nombres que se plasman en el cartel de Jazz Bajo las Estrellas del Thalasso Hotel El Palasiet. Fernando Marco y su guitarra estarán acompañados por Lucho Aguilar en el contrabajo, Felipe Cuciardi en la batería y Jordi Fabregat al violín. Cuatro músicos y cuatro instrumentos para una gran noche. El jazz es pura improvisación, es un acto totalmente creativo, por eso, el guión de la velada está sin escribir. Será el público el que tenga que narrar la experiencia musical que se vivirá el viernes en la terraza de El Palasiet. Lo único que está escrito es el menú de la cena. Unos platos que elabora el chef Paquito Clausell para la ocasión. Dicen que las mejores cosas de la vida surgen por casualidad, así que habrá que dejarse caer “casualmente” por El Palasiet y, simplemente, dejarse llevar.

fernando marco(2)Pero lo que no es fruto de la suerte sino del trabajo constante son los más de treinta años que Fernando Marco lleva dedicados a la música, en especial al jazz. Este género musical ha cautivado a este castellonense de tal manera que lleva el jazz tatuado en el corazón, y nunca mejor dicho, porque gracias a eso consigue transmitir a través de las cuerdas de su guitarra. La trayectoria musical del fundador y actual director de la Escuela de Música Taller 3 está llena de, como hemos dicho al principio, “nombres” que no dejan indiferente a nadie: Louis Stewart, Tete Montoliu, Lou Bennett, Charles McPherson, Peter Bernstein… Son solo algunos de ellos, aunque tampoco hay que olvidar los cinco trabajos discográficos que tiene editados. Sin duda, Fernando Marco es una fuente de música, una fuente de jazz.

Y será con el Mediterráneo como telón de fondo y bajo las estrellas del mes de agosto cuando las mejores melodías cobren vida. El ritmo está más que claro. Será la guitarra de Fernando Marco la que lleve en esta ocasión la batuta de la velada. Aunque especial protagonismo tendrá el violín de Jordi Fabregat. Un instrumento que no estamos acostumbrados a ver en el jazz pero que pondrá la guinda al pastel cautivando al público como ni se imaginan.

No son palabras de Fernando Marco, sino de Jimmy Page, pero por lo que conozco a este guitarrista bien podían haber salido de su boca: “No se puede pensar y tocar. Si piensas en lo que estás tocando lo que tocas se torna en artificial. Hay que centrarse sólo en la música que sientes, concentrarte en la música, enfocarte en lo que estás tocando y dejar que salga de ti. Una vez que empiezas a pensar en hacer esto o hacer aquello, no vas bien. Lo que estás haciendo es como un lenguaje” .

Un lenguaje que el viernes todos entenderemos. Y si no, háganme caso, merece la pena aprenderlo. Les espero.

Jimena Bañuelos (@14ximenabs)